martes, 5 de mayo de 2009

LA VOCACION DEL MEDICO




No es un descubrimiento que gran parte de los profesionales de la medicina han perdido la parte humanista que los identifico con el modelo hipocrático durante milenios, posteriormente para ser considerados como simples técnicos, ávidos de reconocimiento económico y profesional e indiferentes a la sensibilidad humana, estas causas de deshumanización son debido a que la carrera académica no nos exige una verdadera vocación medica, si no un énfasis exclusivo en conocimientos científicos y técnicos, una relación medico-paciente basados en aspectos comerciales con una creciente desconfianza de parte del paciente, una explotación inicua del medico que exigen una producción cuantitativa y no cualitativa, el abandono de la ética medica y la abdicación de el juramento hipocrático, lo que hace médicos poco humanistas que son presentados como "modelos de éxito". Considero inaudito que dejemos a un lado principios humanistas como el amor al prójimo (paciente) que según el juramento hipocrático el amor del medico por los pacientes, sin discriminación por la edad o categoría social, debe ser la expresión de un autentico servicio a la vida y de la voluntad de no rendirse frente a las múltiples dificultades, el principio de solidaridad: compromiso afectivo y efectivo del necesitado, principio de sensibilidad: sentir como propio el dolor ajeno y otros principios éticos como la beneficencia: todo ser humano merece el bien, la justicia: todo ser humano tiene iguales derechos, la bondad: que es una de las primeras cualidades que un medico necesita, buscar primordialmente el bien del paciente en todo acto medico, la sabiduría: estar consciente de la preparación y ser capaz de reconocer las limitaciones, el respeto por el paciente y por la carrera: respetar significa tener actitudes, palabras, gestos, tono de voz adecuados y la presentación pulcra del medico.

Es verdad que el ser medico no es fácil, pues es un compromiso y dedicación con las personas y sus familias, pero si se tiene una verdadera vocación la medicina será ejercida con amor y pasión, será la expresión de nuestros valores, nos dará satisfacción y sentido vital, no seremos solo aquel que receta un medicamento, el que solamente escucha el padecimiento, no veremos la medicina como una simple profesión sino la ciencia que nos da la herramienta para aliviar el sufrimiento humano.

En mi opinión la medicina es la oportunidad que Dios nos da para cuidar la salud con la máxima meta de preservar la vida, siempre desde el más alto concepto de calidad y dignidad.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

tienes razon en tu blog, pero me parece que una idealizacion un poco utopica de tu parte, ya que el medico es solo un trabajador mas y puedo aseguraarte que es la carrera mas egoista y egocentrista que puede haber. aunque esta bien que la veas de esa forma, porque para muchos es un arte en el que se expressa el conocimiento humano.

Anónimo dijo...

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